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El Fuerte de Santa Bárbara da Vila, o simplemente el Fuerte de Santa Bárbara, se encuentra en la ciudad de Florianópolis, en la isla y el estado de Santa Catarina, Brasil.



Este fuerte fue erigido para defender el antiguo pueblo de Nossa Senhora do Desterro (actual ciudad de Florianópolis), en una pequeña isla que bordea la antigua playa del Canto (o Vila), en el estrecho canal de la bahía sur.



Los planos y mapas de la época indican que la estructura ya existía en 1774, y es parte de la encuesta del Alférez José Correia Rangel para la Corona portuguesa ("Plan para servir como una demostración de los lugares fortificados de la isla de Santa Catarina", 1786. en: RANGEL , José Correia Defensa de la Isla Santa Catarina y el Ministerio de Guerra de Río Grande de São Pedro, Lisboa).



Durante la primera mitad del siglo XIX, sirvió como sala militar (SOUZA, 1885: 126), transferida al Cuartel Campo do Manejo en 1861, cuando el edificio (Nacional) se convirtió en la Autoridad Portuaria de las Provincias de San Pedro. Río Grande y Santa Catarina, el Ministerio de la Marina. Los proyectos del Gobierno Provincial para adaptar la propiedad al menor costo se sucedieron hasta 1871, cuando se demolieron los Cuarteles de Tropas y se agregó un cobertizo de dos pisos para la recepción de los colonos. Posteriormente, se cerraron las lanchas cañoneras, se construyó un parapeto sobre la pared, se instalaron cajas de flores y se pavimentó el terraplén. Las nuevas renovaciones comenzaron el 11 de enero de 1875, bajo la dirección del Capitán de Oporto, colocando la cresta de la Capitanía de Oporto el 10 de abril de 1875. En junio del año siguiente se completó la casa del Comandante. de Oporto, adyacente al edificio Capitania (VEIGA, 1993). Durante la Revolución Federalista (1893-1895), se utilizó como sede del Gobierno del Estado, habiendo salvado con motivo de la inauguración del Capitán del Mar y Guerra Frederico Guilherme de Lorena como jefe del Gobierno Provisional revolucionario en Santa Catarina (14 de octubre 1893), para ser retomado por las tropas leales bajo el mando del coronel Antonio Moreira César (17 de marzo de 1894) (Garrido, 1940: 144).



Durante la primera mitad del siglo XX, se introdujeron nuevas intervenciones en el conjunto, que lo caracterizaron por completo, dándole las líneas arquitectónicas características de la década de 1930 (que aún conserva), que acaba de vincularse a la isla, fruto de la vertederos marinos entre el centro de la ciudad y la antigua playa del Canto. En la década de 1950, todavía se notaban los arcos del puente de mampostería de piedra que conectaba el fuerte con la tierra. En la década de 1960, con el cierre del puerto de Florianópolis a la navegación y la desactivación de la Capitanía de Puertos, el fuerte fue amenazado con la demolición, por lo que su espacio integraría el área de ocio de la capital y drenará el tráfico desde el puente de ventas de Colombo. , que une la isla con el continente como parte del nuevo vertedero de South Bay (1973). La prensa local promovió una serie de debates sobre la relevancia o no de preservar el antiguo fuerte, que, a pesar del marcado grado de caracterización, tanto de su arquitectura original como de sus alrededores, tenía garantizada su preservación.



En 1984, el Instituto de Patrimonio Histórico y Artístico Nacional enumeró el resultado de esta controversia y el reconocimiento de su incuestionable valor histórico, el fuerte y sus alrededores, que suman un total de 5.086 m². Aún albergando a la Autoridad Portuaria de Santa Catarina en Florianópolis, el Ayuntamiento y el IBPC estaban estudiando proyectos destinados a la recuperación, restauración y revitalización de la estructura para actividades culturales (teatro, museo, escuela de arte, área de exhibición, con restaurante, bar , parque infantil), y se prevé la bajada de los alrededores al nivel del mar, adaptándose al espacio recuperando así un espejo de agua, restaurando la situación original de la plaza, rodeada de agua.



La propiedad se puede ver en Rua Antônio Luz, 260, al lado de la terminal de autobuses urbanos de la ciudad de Florianópolis, en el terraplén de Baía Sul, en el centro histórico de la ciudad.



Su planta original, en forma de polígono irregular, levantada en mampostería de piedra y cal, albergaba en su terraplén un edificio con techo de cuatro pisos, que comprende el Cuartel de Tropas, el Almacén y la Casa de la Pólvora. El terraplén estaba revestido con un muro de unos 70 centímetros de espesor en la parte superior, casi 5 metros sobre el nivel del mar durante la marea baja, que se comunicaba con la tierra por un puente de mampostería de piedra sobre arcos. Era artillería con doce piezas de bronce y una de hierro de varios calibres, que se registra iconográficamente en las obras de Jean-François de La Perouse (1797), Adam Johann von Krusenstern (1803), Georg Heinrich von Langsdorff (1812), Jean -Baptiste Debret (1822) y otros.

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